Subiendo (Amaia)

Alcé las cejas, mirándome de pies hasta donde más me permitía mi vista, impresionada y algo chocada por su comentario.
¿Enfermera? ¿Yo? Claro... Cada día.
-¿Enfermera? No creo. Nunca me gustó el mundo de la medicina, por algo los enganchados a Hospital Central eran mis padres y no yo -sonreí, cruzándome de brazos-. Pero respecto a lo segundo, tienes razón.
"Tal vez por eso Blackman es un héroe libre", pensé.

Seguií con mi pelotita y sin mirarla demasiado. Hospital Central, menudo rollo de programa. Era demasiado aburrido, las primeras temporadas estuvieron bien, pero en las últimas ya se estaban pasando. Ninguna serie debería pasar de los 100 capitulos, no ahcían mas que destrozarlas y hacer que encasillasen a los actores en un papel que quizas no les gustase.
- Ya bueno y si te pregunto por tus gustos, de fijo que escuchas reggaeton. Te pega un monton hacerlo...- dije medio riendome esperando a que hiciese un comentario diciendo que le daba asco. esta chica era muy predecible.

-¿Reggaeton? -pregunté, mirándolo con las cejas alzadas como diciendo "¿YO? ¿REGGAETON?".
Reí entre dientes por puro instinto, desviando avergonzada la mirada y luego mirándolo, cogiendo su pelota al vuelo justo cuando él iba a disponerse a alzar las manos para cogerla él.
-¿Me ves a mí perreando, Aitor? -pregunté, pasando la bola a mi mano derecha y tirándola, a la espera de que él la cogiera.

Cogi la pelotita al vuelo y volvi a lanzarla contra la pared. Esto era divertido, aunque ella la había hechado sin mucha fuerza y me había llegado a mi al segundo bote y sin mucha velocidad.
- No lo harías mal, aunque no tienes pinta de perrear muy bien. De fijo que yo te perrearía en nada...- dije riendome con ganas antes de mirarla.- Tell me I´m frooozeennn- cante después exagerando los gestos. era la unica canción de ese estilño que conocía.

-Perrear es de tías desesperadas y que sólo buscan líos de una noche -dije, cogiendo de nuevo la pelota que había lanzado al vuelo, y, esta vez, lanzándola con más fuerza para que le llegara casi de golpe.
Aquella no se la esperaba, ¿eh?
-Y yo no busco eso -admití, mirándolo con una sonrisa y con mis mejillas un poco encendidas.
Seguí "jugando" a la pelotita con Aitor, hasta que comenzó a cantar una canción que la tenía más que escuchada.
-Venga ya, ¿conoces esa canción? -pregunté, impresionada-. ¿Seguro que no has entrado en mi myspace? -bromeé.

Tamborilee el suelo del ascensor con mis manos marcando el ritmo de la canción, la verdad es que no se parecía demasiado. Pero yo no tenía ni idea de música asique bastante tenía ya con tamborilear.
- Los myspace son en su mayoría para músicos fracasados y tias que no tienen Tuenti - dije riendome antes de coger la pelotita justo antes de que me diese en la cara. Que fuerza tenía con lo flacucha que estaba...- Nada es que hace un par de años estuve 3 meses saliendo con una gótica que escuchaba eso. Cuando corte con ella se hizo choni y bollera. No le sento demasiado bien la verdad...

Reí entre dientes.
-No te pienses que soy la única retrasada que no tiene ni tuenti, ni twitter, ni youtube, ni facebook... Soy una tía solicitada y bien comunicada -presumí, cogiendo la pelota y volviendo a lanzarla con fuerza-. Vaya. Menudo cambio... -murmuré, refiriéndome a lo de su ex novia.
Yo jamás acabaría por ese camino... Ni de coña, vamos.

Cogi la pelota esta vez bien y tensando todos los musculos de mi brazo para después lanzarla con suavidad, azlcanzando el equilibrio entre el jying y el jang(vaya perlada).
- Tu acabaras siendo choni tarde o temprano, todas lo haceis. Y más cuando entrais a esta comisaría, no salen mas que tias con minifalda que han robado en la tienda de los chinos. Pobres chinos, porque no les dejaran los pintauñas en paz en los estantes...- dije echandome una mano a la frente como si me diese pena.

Alcé las cejas.
-La verdad que antes prefiero vestirme de Chanel y Dior antes de acabar así -admití, rascándome la cabeza, pensativa-. El día que acabe así, si es que acabo, te invitaré a algo por haber tenido la razón. Pero como no la tendrás, ve pensando en cómo perderás esta apuesta. Quiero el premio en bandeja -bromeé.

Eso había sonado a proposición sexual, pero no crei que lo fuese. Eso sería mas bien porque yo estaba demasiado necesitado y necesitaba un buen polvo. Sería eso...
- ¿Prefieres un beso o un cáfe?- dije mirandola riendome.- ¡O que es lo que se apuestan las chonis? ¿haber quien es mas falsa?

Lo miré con una ceja alzada, y, en aquel momento, el elevador se movió y escuché la voz de mi tío fuera.
-¿Amaia? -se oyó, justo cuando el elevador comenzó de nuevo a subir al piso destinado.
Miré el reloj. A lo tonto a lo tonto habíamos pasado una hora allí encerrados.
-¡Sí! -exclamé, poniéndome de pie y cogiendo las cajas- Se había atascado -volví a gritar, apoyada en la puerta del ascensor.
Cuando esta se abrió habían dos pares de personas fuera, quejándose sobre las malas condiciones del montacargas. Mi tío me miró y se ofreció a ayudarme, y yo miré a Aitor, divertida.
-Nunca te daría a ti un beso, Aitor -dije en tono chinche, pero sincero, y saliendo del elevador.
A partir de ahora, iba a empezar a usar más las escaleras...